Den al Cesar lo que es del Cesar...

Den al Cesar lo que es del Cesar y a Dios, lo que es de Dios...
Ayer, martes, siete de junio, el evangelio nos hablaba de una trampa que pusieron a Jesús: ¿hay que pagar el impuesto, si o no? Si digo que sí, voy a la droga. Si digo que no, igual me pasa.Así que el Maestro preguntó:-"Muestrenme la foto de aquel simpático.¿Pa' que sirve?"-"Pa' hacerle regalitos al compadre."-"Déselo, pue'"El otro se quedó la boca abierta, más porque en realidad no le quería hacer regalos al tipo. Jesús se largó, no por ser "largo", si no porque había más cosas interesantes que hacer.¿Cual será la indirecta bien directa para mí? Que soy un tramposo, más todavía en mis cosas diarias.Es hora de leer ese catecismo católico que tengo en el armario, entre polvos y olorcitos,para constatar que no trata el cuarto mandamiento de Dios sólo del patojo, que
sí,obedece a mamá. Pero que señala las reglas cristianas para vivir en sociedad también.
No me gusta pagar el IVA, pensando que "ellos" son ladrones y así me vuelvo uno de ellos. ¿Con que pisto harán mi calle? ¿Con que dinero tendré luz eléctrica? No con los besitos de la patoja muy eléctrica, por supuesto. Como soy muy individualista, que pienso tener sólo derechos y no obligaciones, me siento muy comodón y digo a la tiendera: no, gracias; no necesito factura con IVA.A la hora de dar el gasto, guardo algo para mis "frías". Cada uno en casa tiene "su pisto" y los hijos más grandes que ya trabajan, no dan ni un len para el gasto.La Chavelita pega el suelo del pie cuando su madre le pide ir a comprar azúcar en la tienda. Así que todos se quedan con café amargo en casa. Las caricaturas de la Chavelita son más importantes. A la hora de votar, no voy. ¿Pa' qué? Así que los que logran los puestos, hacen micos y pericos. En favor de los de la plata y de los gringos. Fijate que nos van a globalizar:en un globo, todos revueltitos. Los que podrán respirar allí mejor serán los de nariz grande. Y hablando inglés: suena mejor. A la hora de ir a trabajar, sueño con ganar mucho y no cansarme con mucho trabajo. Me encanta "chambonear" y lo hago muy bien. Sé hacer de todo, patroncito, y a mi modo.Pero no busco especializarme. Así que la oferta de chambones es grande y de empleos muy pequeña: demasiado candidatos para lo mismo.Fuí a la escuela, eso sí. Lo indispensable para leer y escribir; entonces, papá me mandó ir a trabajar: de payasito en los cruces. Da pisto, Usted! Al leer, separo muy bien las sílabas, y todos estiran la oreja para captar.Me visto de telas bien vistosas que no tardan mucho: con un fosforito mal puesto, luego hay hoyos impresionantes. Prueba y verás. Me acusan de querer aparentar. Pero, eso sí, da resultado y se consigue lo que se busca.Me encanta arrancar las florecitas que veo, dejar mi firma en los asientos de los buses,
y orinar en los rincones de las puertas. ¡Eso es vivir, Usted!Mientras es el viejo vecino de al lado que se va "con Pancho", lo encuentro muy natural: era viejo, ¿no? Yo soy eterno y quitate de allí que me meto yo.Cuando manejo, muestro a menudo el dedo medio a los demás en seña de saludo afectuoso y pito cuando el tal por cual de delante no se mueve. Me meto en la fila a la buena de Dios y me rio al ver el pelo parado de algunos. Tengo suerte,¿ya ven?Compro esos aparatitos de TV-offer y los dejo encima del armario: nunca se sabe, pueden ser útiles. El gasto no alcanza y compro en la tienda a fiado. Cuando es mucho, cambio de tienda. La dueña de la primera estará bien contenta de verme de regreso. La mujer compra su aceite en la misma tienda por pushitos, lo que hace subir el gasto seriamente. ¿No sería mejor comprar por mayor? ¿En el lugar apropiado?Serio, ese cuarto mandamiento, Usted: me obliga a hacer "bien" y "mejor", mis cosas y a saber organizarme en familia, coco a codo, y en la sociedad mejor y mejor.Todo cabal, así lo quiere Dios.
Tu cuate.